EDITORIAL

“Dos hechos que nos estremecen de espanto”

Oiga 12/08/1993

Dos suceso casi simultáneos, uno ya conocido por la opinión pública y el otro divulgado hoy en esta edición de OIGA, nos muestran el lado oscuro, el lado que se quiere mantener oculto, del régimen autoritario, con barniz democrático, que gobierna al país. Me refiero al descubrimiento de fosas clandestinas, con restos humanos calcinados, logrado por la revista SI, y a las revelaciones que, sobre la probable estructura real del actual régimen, puso en manos de OIGA un pajarito verde.

Esas tumbas de Cieneguilla, malolientes, escondidas a la vera de un camino de basura transitado por la miseria, pueda que no haya guardado los restos de los desaparecidos de La Cantuta, tal como lo creen muchos y lo propaga el rumor general. Pero allí si se escondieron huesos humanos calcinados y es posible que en esos muladares reposen otros muchos crímenes, de aquellos que seria demasiado difícil imputárselos al hampa y bastante improbable que sean obra de lo terroristas -los mas crueles genocidas de nuestra no tan amable historia patria-, por estar ubicada allí, muy cerca, una base militar de vigilancia. Esos huesos humanos calcinados, con un llavero de recuerdo entre ellos y el increíble desinterés de las autoridades gubernamentales por custodiar las tumbas, son testimonio de los tiempos que nos ha tocado vivir. Pueden ser cadáveres de senderistas quemados por sus propios compañeros para que nadie los pueda identificar, puede ser cierto el rumor de que serian restos de los desaparecidos de La Cantuta. O de otros desaparecidos, añado, pensando en los textos que hoy publica OIGA, preparados por un secreto "Equipo de Trabajo" y por el Servicio de Inteligencia, para un pronunciamiento militar que debió producirse en 1990, que se inicio el 28 de julio de ese año y se consolido con el golpe militar del 5 de abril de 1992.

Se trata de dos hechos secretos, secretísimos, y que, por lo tanto, no dejan huella evidente. No tienen firmas ni sellos. No hay declaratorias de defunción. Tampoco existen pruebas testimoniales comprobables. Hay, en un caso, el dato preciso, con mapa, de un anónimo elemento de Contrainteligencia o de la propia Inteligencia que ha querido liberar su conciencia o enredar los hechos. Pero los muertos están, son ciertos, son huellas de métodos que horrorizan, que hace se nos escarapele la piel y conducen al otro caso, a los documentos publicados hoy en esta revista, en el que las pruebas no están en firmas y sellos sino en la credibilidad, en la seriedad del pajarillo verde que deposito los textos en mis manos y en que esos textos casan, calzan, se machihembran a la perfección con los hechos públicos y semipúblicos que van ocurriendo al mismo tiempo de lo escrito. Cada comentario tiene su correspondiente comprobación en un suceso notorio. Bueno, no todos, como, por ejemplo, el juicio escrito sobre la necesidad de exterminar al "excedente poblacional nocivo, irrecuperable, como son los terroristas, vendedores de pasta básica, agitadores y demás traidores a la patria".

Se trata de documentos que revelan el carácter del régimen que preparaba, desde mediados de 1989, una logia militar con orden del Comando. Régimen que, a ultimo momento, fue negociado con el presidente electo, Alberto Fujimori, porque este venia a resultar el mas aparente cabecilla para la "Democracia Dirigida, civil-militar" diseñada en los círculos castrenses.

En los textos se hallan opiniones absolutamente ciertas sobre la realidad peruana -mas que certeras en el análisis de la responsabilidad de Alan García- y es imposible quitarles la razón a muchos de los argumentos allí expuestos sobre la difícil gobernabilidad del Perú y la necesidad de contar con metas estratégicas nacionales de largo plazo. Se puede decir que a su lectura brotan verdades de a puño, aunque la mayoría de estos puñetazos sean mas del agrado de la sensibilidad política de las llamadas derechas, que de otros sectores con mayores inquietudes sociales y populares. Hay, sin embargo, aspectos siniestros que a ningún demócrata, a ninguna persona con cierto refinamiento humano, pueda dejar de espantar. Se trata de un proyecto mesiánico, de orientación totalitaria, que nada tiene de democrático por mas titulo de "Democracia Dirigida" que se haya puesto.

En los lineamientos del plan, trazados en octubre de 1989, y en Anexos posteriores a esa fecha, están insertos los planeamientos que, como grandes novedades, viene, repitiendo Fujimori: Libre comercio, "reinsertación ", pena de muerte, pacificación, reforma educativa, acuerdo en las fronteras (entendiendo que "el aspecto territorial ha sido ya rebasado"), necesaria continuidad en el mando (reeleccion), etc. Pero hay puntualizaciones muy reveladoras del nefasto mesianismo que inspira al proyecto en general, hasta ahora mantenido en el mismo misterio, y que apenas se dejan entrever en algunas de las bruscas declaraciones de Fujimori; como cuando, por ejemplo, se ufana de tener el mejor Servicio de Inteligencia de América Latina. En los textos conspirativos se da, justamente, mayor importancia a lo que llaman "Sistema de Control, Seguridad y Propaganda" y que en esas mismas paginas se especifica que "si, definitivamente, el Sistema es el equivalente a una Gestapo". El carácter antidemocrático del proyecto aparece por todos lados. Desde la "relación" que se seguirá con la prensa ("El objetivo mínimo consiste en conseguir la autocensura, dejando entrever nuestra decisión de ir hasta las ultimas consecuencias"), hasta el modelo secreto del gobierno a montarse, muy explicativo de por que en el régimen fujimorista tiene tan poca importancia el Consejo de Ministros. En el esquema del proyecto esta explicado que la conducción de la política estratégica nacional a largo plazo corresponde a un "Consejo Estratégico de Estado" (CEE), "delegando el protagonismo, los aspectos diplomáticos y sociales y los problemas de corto plazo a los distintos encargados de los portafolios ministeriales". El CEE será un misterio y no tendrá por que asistir a los Consejos de Ministros, "quedando con las manos libres, fuera del ángulo visual del enemigo, para impulsar al país y hacer frente a las necesidades de la guerra". El servicio de cámaras ya instalado, en la época de Alan García, en la Sala del Consejo de Ministros, le servirá al CEE para seguir de cerca por video las sesiones que crea necesario supervisar. Y siguen las perlas. Todas con desagradables evocaciones de equívocos salvadores de sus patrias, de trágicos devaneos autoritarios. De desastres que tuvieron auroras deslumbrantes.

Esta funcionando el actual régimen bajo el esquema trazado en los documentos que hoy comienza a publicar OIGA?... Por desgracia hay demasiados indicios de que es así. ¡Pobre Perú! Vamos de mal para peor, porque nunca, por ciertos y grandes que sean los males que es necesario superar, han sido buenas las soluciones mesiánicas, totalitarias, autocráticas. Siempre, a la corta o a la larga, las lágrimas borraran los aciertos que pudiera haber tenido el despotismo.

Publicado en revista OIGA, 12 de julio de 1993.

© Derechos mundiales de prensa en todas las lenguas reservados a EDITORIAL PERIODISTICA OIGA, 1993.

ARTOLA ARBIZA Antonio Maria. Ezkioga. En el 80° aniversario de la Pastoral de Mons. Mateo Múgica Urrestarazu sobre Ezkioga (07/09/ 1933), Ezkio, Fondo Editorial Revista Oiga (978-61-2465-76-03).

“Se trata de documentos que revelan el carácter del régimen que preparaba, desde mediados de 1989, una logia militar con orden del Comando. Régimen que, a último momento, fue negociado con el presidente electo, Alberto Fujimori, porque este venía a resultar el más aparente cabecilla para la "Democracia Dirigida, civil-militar" diseñada en los círculos castrenses”. FRANCISCO IGARTUA. Oiga 12 de julio 1993.

VIDENTES DE EZKIOGA

VIDENTES DE EZKIOGA
ARTOLA ARBIZA, Antonio María. Ezkioga. En el 80° aniversario de la Pastoral de Mons. Mateo Múgica Urrestarazu sobre Ezkioga (07/09/ 1933), Ezkio, Fondo Editorial Revista Oiga (978-61-2465-76-03).

lunes, 14 de enero de 2013

LA TERCERA DE LIMA


El proyecto nacionalista de la Eugenesia y el caso de las esterilizaciones forzadas en el Perú

Por: Vanessa Verástegui Ollé
Maestría de  Antropología con mención en estudios Andinos PUCP

¿Políticas Públicas de Salud, Misoginia o Limpieza Racial?

“Nosotros decidimos tener solo dos hijos. Por eso elegimos el método de ligadura de trompas y somos felices”[1]

“Luego de la ligadura o vasectomía encontrarás la felicidad”[2]

Los epígrafes que abren este ensayo fueron las consignas de la campaña de planificación familiar que se promovió entre los años 1999- 2002 durante el mandato de  Alberto Fujimori. Tras la aprobación de la Ley General de Población[3],  en 1995, se  esterilizaron en el Perú a más de 300 mil mujeres bajo el rótulo de “Anticoncepciones Quirúrgica Voluntarias” como una medida extrema de planificación familiar, para lo cual se solicitaba solo el consentimiento firmado de la persona[4],  aunque en la práctica real se contravino esta condición.

En el marco de la Conferencia  Internacional de Población y Desarrollo  del Cairo  (1994)[5]  cobraron importancia los temas de la salud sexual y reproductiva para la reducción de la mortalidad materna e infantil, y con ello,  se esperaba lograr el desarrollo social y bienestar de la mujer. El gobierno de Fujimori se comprometió a brindar gratuitamente los métodos anticonceptivos y los servicios de planificación familiar a los/as usuarios/as de salud.

A partir del año 1996, se aprobó el Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación familiar 1996-2000, el  mismo que  subrayaba la gratuidad de los servicios, el método de anticoncepción, incluyendo la cirugía de esterilización[6].   Este programa si bien implicó una serie de esterilizaciones quirúrgicas en mujeres y la vasectomía en los varones, los testimonios y las denuncias recogidas por la dirigente campesina, Hilaria Supa Huamán[7]  demostraron que las víctimas fueron en la mayoría de los casos mujeres indígenas quechuahablantes[8].

Desde entonces el Ministerio de Salud y el Instituto Peruano de Seguridad Social emprendieron una masiva campaña de planificación familiar animados con “festivales de salud” en la sierra, selva y zonas urbanas populares. Se realizaron actividades festivas, deportivas, campañas de ligaduras de trompas, campañas preventivas promocionales, spots radiales y esterilizaciones “al paso”,  llegando a intervenir a 90 mujeres por día[9].

En el presente ensayo se abordará la correlación que existe entre el caso de las esterilizaciones forzadas aplicadas en el Perú y  la eugenesia[10] como  una Política de Control Poblacional y no una Política de Salud Reproductiva.  El  discurso eugenésico persiste actualmente de manera subrepticia en el discurso oficial del Estado sobre el control de la natalidad “a favor de la salud y el bienestar de la población más pobre”.

Este discurso eugenésico se recicla y se reconfigura en nuevas narrativas y se pone en práctica con la aplicación de un Programa de la Anticoncepción Quirúrgica Voluntaria (AQV) en el que intervinieron los criterios de raza, género y clase, por el cual las mujeres quechuahablantes, indígenas pobres de la sierra y selva fueron las más perjudicadas. La misoginia está presente en estas prácticas de esterilización forzadas y se evidencian en los testimonios de las mujeres, quienes admitieron haber sido exhortadas, entre artimañas y violencia psicológica, a someterse a las mismas.

Sobre las esterilizaciones forzadas en el Perú existen tres informes oficiales. El primero, el Informe Final de la  Comisión Especial (2001) del que Hilaria Supa Huamán[11]  fue parte; los reportes de CLADEM: “Silencio y Complicidad. Violencia Contra las Mujeres en los Servicios Públicos de Salud en el Perú” (1998) y “Nada personal. El  reporte de derechos humanos sobre la aplicación de la anticoncepción quirúrgica en el Perú” (1999). Estas investigaciones demostraron que la aplicación de las AQV no fue realmente voluntaria como estaba estipulado en la Ley General de Salud  según la cual nadie podía ser sometido a tratamiento quirúrgico sin su consentimiento previo. Asimismo, consagraba el derecho de toda persona a elegir libremente el método anticonceptivo de su preferencia[12].  Con el siguiente testimonio se prueba cómo se arremetió contra este principio del consentimiento informado de una mujer de la comunidad de Santiago de Pupuja, Anta, dado que no se le consultó  -como la persona dueña de su cuerpo- sino a su cónyuge:

“Me operaron el 12 de noviembre de 1997 en la posta de salud de Limatambo cuando tenía 22 años en circunstancias cuando iba al chequeo de mi hijo menor. La obstetriz Elvira no sé su apellido, me convenció. En la asamblea comunal llegaron las enfermeras de la posta de salud de Limatambo informando sobre la ligadura. Hicieron firmar a varios hombres, dentro de ellos a mi esposo. Yo nunca firmé ninguna autorización… “[13]

Prueba de ello es el de una mujer de Manta (Cusco) cuyo esposo, que no sabía leer, fue obligado a firmar el documento ignorando que el fin era la esterilización de su mujer:

“Me buscaron muchas veces para convencerme de operarme. A mi esposo le hicieron firmar un papel y le dijeron que me van a hacer curar, pero como era analfabeto, no sabía lo que decía el documento, además amenazaron a mi esposo que si no me presentaba en la posta, la policía lo llevaría preso a él. Mi esposo de miedo me obligó ir…”[14]

Estos testimonios y denuncias demuestran la política de control de natalidad del gobierno de la década del noventa y la manera como pretendía privilegiar las esterilizaciones quirúrgicas sobre otros métodos de anticoncepción:

“Estaba dando a luz en mi casa, y mi esposo fue al centro de salud de Anta (Cusco) para que venga  la  enfermera a darme atención médica. Cuando  la enfermera vino a mi casa me dijo que no me cuide con pastillas ni inyecciones porque eso hacía daño y me dijo que la ligadura era el mejor método y que debía operarme…”[15]

Igualmente, los testimonios denunciaron la entrega de cuotas de captación a los agentes de salud en dinero o especies por cada usuaria; la  manipulación de la condición de pobreza y la presión sistemática individual mediante visitas domiciliarias como artificios para convencer tanto a la intervenida como al cónyuge al sometimiento quirúrgico de  esterilización; además de la omisión de información sobre riesgos, precauciones y cuidados postoperatorios. Estos hechos sacaron a la luz las negativas de los prestadores de salud a la aplicación o entrega de otro método que no fuera la AQV.

El siguiente testimonio[16] pertenece a una mujer de Anta, operada sin  haber firmado el documento de consentimiento informado luego de acudir al hospital para dar a luz. Los delitos en que la autoridad incurrió fueron los de negligencia médica y engaño, además de haberle provocado secuelas físicas a la víctima:

“Di a luz en el centro de salud de Izcuchacca. De ala en casa, comencé a sangrar. Tuve que regresar al centro de salud. Al revisarme, el médico vio que habían olvidado 4 gasas. Al sacarla y sin consultarme fui operada en el centro de salud de Izcuchaca el 25 de junio de 1997. No firmé ningún documento. Sólo me enteré que había sido operada en el mismo momento en que sacaban las gasas…Siempre tengo dolores y abundante sangrado.”[17]

Las negligencias médicas produjeron infecciones y muertes a muchas mujeres. Es   el caso de los testimonios de los vecinos de la señora Magna, el de su  esposo y el de su hijo, los cuales revelan el deceso de la mujer en la sala de emergencia del Hospital Rural de Tocache:

“…le negaron la atención médica argumentando que la Campaña de Ligadura de Trompas había concluido”.[18]

“Entonces mi hijo corrió y llamó a los enfermeros, varios entraron y dijeron: Hay que echarle aire, hay que quitarle el suero. Le pusieron una máscara de oxígeno que tuvo hasta que murió.” [19]

En el reporte “Silencio y Complicidad” se informa que las enfermeras y promotoras presionaban constantemente a las campesinas a ligarse las trompas bajo violencia psicológica:

“Nos decían que éramos animales, ignorantes, si no aceptábamos ligarnos.”[20]

“Cuando íbamos al pueblo para hacernos ver, ni caso nos hacían en el hospital, como asco nos tenían. Y ahora, nos buscan todo el tiempo diciéndonos para la ligadura. Algunas (promotoras) comenzaban hablando bonito, pero si decíamos que no, no aceptaban y nos decían ignorantes, nos gritaban, qué íbamos a hacer” [21]

El testimonio de una campesina analfabeta de Anta, Cusco, [22]muestra cómo fue esterilizada a la fuerza con engaños y violencia:

“En mayo de 1997 fui visitada por una enfermera  (no recuerdo el apellido) quien ya me había buscado varias veces.  Mi esposo se niega a la enfermera a recibir a la enfermera pues ya había escuchado en la calle que cortaban mujeres para que no tuviera hijos. Sin embargo, 2 enfermeras me ubicaron y envuelta en una frazada y diciendo que me iban poner una inyección para la anemia, me llevaron a la posta. Cuando llegué a la posta, me dijeron que para evitar hijos con anemia, me iban a ligar pues así me iban a curar…Asustada quise escapar pero lograron meterme a la sala. Me acostaron en el piso atada por las manos.  Pedí que no me cortaran pues tenía la T de cobre. Me contestaron que me la sacarían y que no pasaría nada. Y que además mi esposo había firmado y que la operación solo duraría un año…”[23]

En el informe de CLADEM “Nada personal” se ha publicado el testimonio de una mujer campesina quechuahablante, analfabeta, de Mantoclla, quien revela también haber sido llevada a la fuerza por una enfermera y un sanitario; denuncian asimismo el uso de AQV como manipulación de la pobreza por parte de los agentes de salud: “… si te ligas va haber más alimentos, porque si no vas a parir todos los años como conejo…”[24]

El discurso de la lucha contra la pobreza era el lenguaje oficial del Estado como un pretexto para realizar extorsiones y  esterilizaciones forzadas a las mujeres  en las políticas públicas de salud reproductiva. Así lo ilustra el testimonio de otra mujer quechuahablante[25], quien fuera visitada en su casa por una enfermera en tres ocasiones para convencerla de operarse, ya que carecía  de recursos económicos para la educación de sus hijos:

“La primera vez que me exigieron, diciendo: hazte ligar y tratar para que ya no tengas más hijos. Ahora ya no es fácil tener tantos hijos, después te puedes lamentar. También dijo que, según el gobierno solamente, los ricos podrán educar a sus hijos…Anímate de una vez, el 28 de mayo vamos a hacer la ligadura. ¡Anda!...”[26]

La cita de la dirigente campesina Hilaria Supa Huamán es una prueba de cómo la eugenesia se proyectó  en el cuerpo femenino como una política de reproducción biológica de la nación, [27]en un intento de limpieza  étnica y racial.

“Cuando denunciamos en Lima que muchas mujeres sufrían dolores por las intervenciones quirúrgicas, las autoridades nos decían que eso no se debía a la ligadura de trompas, sino porque éramos sucias, ignorantes y flojas”.[28]

Estos calificativos de sucias, ignorantes y flojas develan que el racismo todavía persiste y nos traslada al Perú oligárquico del siglo pasado, época en que la élite intelectual difundía escritos sobre la superioridad de la cultura occidental y de la raza blanca europea, influenciados por el positivismo y el racismo científico del siglo XVIII. [29]Nos traen a la memoria también los pensamientos radicales de Clemente Palma,[30] Alejandro Deustua[31]  o Manuel Atanasio Fuentes,[32]  quienes compartían la imagen del indígena como una raza degenerada, solo rescatable por medio del mestizaje cultural y biológico.

La eugenesia  era el discurso científico racista de la medicina basada en la genética y en las leyes mendelianas[33] para salvaguardar la raza en el supuesto de que la herencia perpetuaba no solo las características físicas de los fenotipos sino también las enfermedades psíquicas y patológicas (sífilis, tuberculosis, alcoholismo, tumores, neurosis y perturbaciones al sistema nervioso). Por tanto, la eugenesia desestimó ciertas mezclas raciales con grupos étnicos considerados inferiores, como el asiático y el africano. En el Perú, el discurso eugenésico médico fue introducido tras la derrota  peruana en la guerra con Chile. La derrota sufrida por los peruanos mermó la autoestima del país como nación. El proyecto nacionalista de entonces quiso revertir la imagen de la nación peruana civilizando a su población mediante el control de la sexualidad femenina como un medio para la propagación y perpetuación de la especie humana.  Para la historiadora María Emma Mannarelli, tras analizar diversas tesis de grado de bachiller en medicina[34], la eugenesia fue el correlato del racismo científico en la medicina. Ella demostró que tanto la  eugenesia como el racismo científico influyeron en el  discurso médico  al encontrar asiduamente las ideas de la “superioridad e inferioridad de las razas” en  citas médicas:

“La Eugenesia pretende luchar contra todos los factores de inferioridad racial, de inferioridad biológica, ya que el factor racial y el biológico son el soporte de la hegemonía étnica y como en la especie humana se siguen las reglas generales de la multiplicación de los seres bisexuados, es necesario que la Eugenesia ocupe un lugar preponderante en las formas actuales que la humanidad de Occidente acepta para propagarse…”[35]

En  el discurso médico también se podía leer la misoginia cuando se trataba la  naturaleza reproductiva, biológica de las mujeres, para engendrar individuos sanos sin deformaciones patológicas y proliferar la masa humana. Para ello, el discurso médico intentó inculcar una cultura higienista  con una serie de prescripciones a fin de reducir la alta tasa de mortalidad infantil y la mortalidad materna.[36]

Como bien lo señala la socióloga israelita Nira Yuval Davis, las mujeres por su rol natural de parir, no son consideradas como personas, individuos, trabajadoras y esposas, sino como miembros de colectividades nacionales[37];  son como “productoras biológicas de niños/personas; las mujeres, por lo tanto, también dan a luz al colectivo”.[38] Se puede advertir en el estudio de Mannarelli una reiteración  constante de la misoginia  médica  en la idea de considerar ignorantes y sucias a las mujeres y en cosificar el aparato reproductivo como indispensable para la concepción.[39]

A propósito de los proyectos nacionalistas de control de población, Nira Yuval Davis sostiene que comprenden uno o más discursos según el contexto histórico. Ella  menciona a tres como los principales: gente como poder; discurso eugenésico y discurso maltusiano.[40]

Sobre el discurso eugenésico, Yuval señala que es la búsqueda de la mejora de la calidad de la nación, alentando a los que son adecuados a tener más niños según raza y clase y desalentando a otros. [41] Ello se percibe en el proyecto nacionalista del siglo XIX porque las políticas eugenésicas incrementaban la masa poblacional; la procreación de individuos sanos en bien de los futuros ciudadanos, sin mezclarse con razas “inferiores”. Entonces se condenó tener relaciones sexuales y contraer matrimonio con dichas razas por ser vistas como impuras, contaminantes, indeseables porque podía degenerar la raza. [42] En tanto, el proyecto nacionalista a fines del siglo XX (1999-2002), estuvo más bien orientado a reducir la tasa de natalidad y el crecimiento de la población.

Al mismo tiempo del “discurso eugenésico” se dibuja el discurso de la “gente como poder”, que considera el mantenimiento y la ampliación de la población de la colectividad nacional como vital para el interés nacional. [43] Así, calidad y cantidad son variables que se involucran en el proyecto nacionalista de control poblacional del siglo pasado.

De acuerdo a la propuesta teórica de Nira Yuval Davis, el Programa de las Anticoncepciones Quirúrgicas Voluntarias (AQV) se ajusta al discurso malthusiano y también al discurso eugenésico. Al primero, porque el discurso malthusiano busca la reducción demográfica de los niños para prevenir futuros desastres como la hambruna.[44] Y al discurso eugenésico, porque si bien el discurso oficial del Estado discurría sobre la base de la salud y el bienestar para la población pobre, el proyecto nacionalista de control de población de Alberto Fujimori estuvo enfocado en mejorar la “calidad” de la nación peruana, demostrando  de esta manera  el racismo hacia el/la indígena como contaminante,  impuro e indeseable.

Por lo tanto, la política nacionalista de eugenesia del ex dictador Alberto Fujimori  involucraría “cantidad” y “calidad”; o sea la disminución de la raza indígena con el fin de  alcanzar la “raza perfecta”; tal cual fuera proclamado en el Perú a principios del siglo pasado. El gobierno de Fujimori se propuso como meta reducir la tasa de crecimiento poblacional mediante la reducción de la tasa de fecundidad. Para el año 1995, se planteó llegar a la tasa poblacional de 1.9 frente a la cifra de 2.1 de 1991; así como reducir la tasa de fecundidad de 3.5, en 1991 a 3.0 para 1995. [45]Para ello se  ofrecieron incentivos a los profesionales de salud en el sentido de que consiguieran esterilizar a un mayor número de personas y se sancionó a los que no cumplían con las metas establecidas. [46]

Los siguientes testimonios de agentes de salud, reunidos por el equipo de investigación de la Comisión Especial sobre Actividades de Anticoncepción Quirúrgica  Voluntaria (AQV) demuestran lo dicho:

“Mire las metas eran fijadas de acuerdo a los indicadores demográficos, si usted en un departamento tenía digamos 5 ó 4 hijos por pareja lógicamente que había que hacer un poquito más de presión, en cuanto lo que es el método de planificación familiar.” [47]

“Nosotros habíamos estratificado de acuerdo a la zona donde hubiese mayor concentración, la mayor cantidad de mujeres con más de 4 hijos y ese fue el criterio que nosotros utilizamos para hacer énfasis. No había directiva escrita sino verbal, todo el mundo decía que había que hacer énfasis en la ligadura porque es un método definitivo.”[48]

“… y es más empezaron a amenazar, que si no traían tantas mamás para las ligaduras, o sea corrían pues el peligro de ser despedidas, entonces, prácticamente les han obligado a las chicas…Bastante presión, y hasta ahora, o sea nosotros nos miden por metas programadas.”[49]

El informe final de la referida comisión especial sobre los AQV señala que -según los testimonios recolectados- desde 1994 se seleccionó un grupo de médicos militares de 25 militares del Ejército, Fuerza Aérea y Policía Nacional para diseñar el proyecto “Plan de Contingencia y Emergencia AQV” para detener el crecimiento demográfico siendo los “conejillo de indias” los pobres e indígenas, considerados por el Estado como excedentes, inferiores y atrasados:

“Ha quedado demostrado la necesidad de frenar lo más pronto posible el crecimiento demográfico y urge, adicionalmente un tratamiento para los excedentes existentes utilización generalizada de esterilización en los grupos culturalmente atrasados y económicamente pauperizados. Sin estas cargas innecesarias, se facilitaría al acceso de grupos familiares débiles a cierto nivel de bienestar…Los métodos compulsivos deben tener sólo” el carácter experimental, pero debe ser norma en todos los centros de salud a la ligadura de trompas”.[50]

Según la Comisión Especial, este Plan de Contingencia AQV formaba parte del plan militar llamado Plan Verde, que planteaba el extermino de la población excedente, considerada nociva para la raza humana  en cuyo extracto se ilustra lo dicho:

“…aplicar un plan que pretenda la eliminación del excedente poblacional y los sectores nocivos de la población. Consideramos a los subversivos y a sus familiares directos, a los agitadores profesionales, a los elementos delincuenciales y a los traficantes de pasta básica de cocaína como excedente poblacional nocivo…para estos sectores dado su carácter de incorregibles y la carencia de recursos…sólo queda su exterminio total”[51]

Si pasamos revista al concepto de la eugenesia en 1883 por Francisco Galton y a la publicación médica de un congreso sobre la eugenesia que tuvo lugar en Londres (1912), se advierte la presencia de esta ideología sobre el mejoramiento de la raza en el Proyecto Nacionalista de fines del siglo XX:

“El estudio de los factores sometidos al control de la sociedad y susceptibles de modificar las cualidades raciales de las generaciones futuras”[52]

“Ciencia que estudia los medios para perfeccionar la raza humana a través de la mejora del vigor y salud de la prole…”[53]

La  proliferación de indígenas, quechuahablantes y pobres debía evitarse. Para garantizarlo se aprobó la gratuidad de los métodos anticonceptivos, incluyendo las AQV,[54] así como el servicio gratuito de planificación familiar. Como bien señala Paul Ehrlich, las políticas poblacionales en el Tercer Mundo combinan la explicación o el conocimiento con el pretexto de “salir de la pobreza” con el temor racista de ser inundados por los “Otros”, los no occidentales.[55]

La consigna difundida en una banderola: “Solo debes tener los hijos que puedes mantener”[56]  y los mensajes radiales: “ya no es tiempo de tener más hijos. La única solución  para evitarlo es la ligadura de trompas[57]”; “gratuito, gratuito, ven a tu centro de salud y amárrate para no tener más hijos y ser un trome”,[58] permiten dar una lectura del discurso eugenésico y del maltusiano, puesto que están sujetos al poder de las narrativas que sostienen la pobreza, la miseria y las hambrunas en el Tercer Mundo. En el informe final de la comisión especial  sobre AQV se indica que en uno de los afiches de la campaña se aludía a una familia que es pobre por tener muchos hijos, y que los padres que tienen muchos hijos son culpables de su pobreza.[59]

Como diría Foucault, sexo, saber y poder se imbricaron en el proyecto nacionalista del siglo XX, ya que mediante el instrumento de la sexualidad femenina y la supuesta verdad de la pobreza se intentó controlar los nacimientos de indígenas/andinos/as pobres -considerados/as solo como seres biológicos y anónimos- que formaban parte de la masa.

Para Michael Foucault, las relaciones entre sexo, saber y poder configuran el  biopoder que se ejerce no externamente, sino a través de los  conocimientos de la salud y de la medicina. Estas son formas de ejercer poder para producir verdades con el fin de determinar cuáles serían las políticas públicas para el bienestar de la población. Así, la política eugenésica del Estado peruano devino en el biopoder[60] que, para el bienestar de los hegemónicos y de los superiores, arremetió contra los que constituían una amenaza, es decir, contra la población indígena  bajo la forma de política de salud.

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CONGRESO
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http://www.congreso.gob.pe/congresista/2006/hsupa/_hoja-vida.htm

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“Medicina, estado y reproducción en el Brasil de inicios del siglo XX”.
Iconos. Revista de Ciencias Sociales. Num. 28, Quito, mayo 2007, pp. 47-57.  Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales-Sede Académica de Ecuador.
En: http://www.flacso.org.ec/docs/i28rhoden.pdf

SUCCA RAHME, Juan; GARCIA TROVATO, Maita; SUPA, Hilari y REYES SOLARI, Esperanza
Informe Final de la Comisión especial sobre Actividades de Anticoncepción Quirúrgica Voluntaria AQV. Lima- Perú. Julio del 2002.
En: http://www.mamfundacional.org/ef/Informe-Final.pdf

MEDINA DOMENICH, Rosa
Eugenesia y formas de hacer historia- Cuestiones para el debate.  DYNAMIS. Acta Hisp. Med. Sci. Historia. Illus. 2004. 24, 291- 305.
En: http://www.raco.cat/index.php/Dynamis/article/viewFile/113917/142103

MOVIMIENTO AMPLIO DE MUJERES
Testimonios de 12 campesinas de Anta entregados a la Comisión de Derechos Humanos del Congreso de la República, al Ministerio de Salud y la Fiscal de la Nación en setiembre del 2001.
En: http://www.mamfundacional.org/ef/Testimonios-Mujeres-de-Anta-AQV.pdf

[1] Consigna de la campaña que se llevó a cabo en San Lorenzo, Alto Amazonas, departamento de Loreto, octubre de 1996. En:   Informe de CLADEM-  Comité de América Latina y el Caribe para la defensa de los derechos de la mujer. “Nada Personal”. Reporte de Derechos Humanos sobre la aplicación de la anticoncepción quirúrgica en el Perú 1996-1998. Pp.  71.
[2] Consigna de un folleto de la campaña. “Informe  Final de la Comisión Especial Sobre Actividades de Anticoncepción Quirúrgica”. Lima- Perú. Julio del 2002. P. 81. En: http://www.mamfundacional.org/ef/Informe-Final.pdf
[3] Ley 26530, aprobada  el 9 de setiembre de 1995. Esta ley  reemplazó  la “Ley de Política Nacional de Población” de Fernando Belaúnde Ferry  la cual  no incluía las  esterilizaciones quirúrgicas como un método de planificación familiar.
[4] Ideele. “Se puede ligar los derechos”.  En: http://www.idl.org.pe/idlrev/revistas/119/pag53.htm
[5] Realizada del 5 al 13 de setiembre de 1994.
[6] Con la  promulgación de la Ley General de Salud, en 1997.   En: Informe Final de la Comisión especial sobre Actividades de Anticoncepción Quirúrgica Voluntaria AQV. Opcit. Pp.21-23
[7] Hilaria Supa  Huamán es actualmente congresista de Unión por el Perú. En el 2001 viajó a Lima para entregar a la Comisión de Derechos Humanos del Congreso los 12 testimonios de  mujeres campesinas de Anta (Cusco) quienes fueron sometidas a las AQV. Ha sido impulsora de la campaña  Por Verdad, Justicia y reparación para mujeres que fueron esterilizadas contra su voluntad” en el 2001. En el 20005 la postularon al Premio Nóbel de la Paz.   En: http://www.congreso.gob.pe/congresista/2006/hsupa/_hoja-vida.htm
[8] Según el Informe Final  de la Comisión Especial sobre las Actividades Quirúrgicas Voluntarias, el MINSA -  Ministerio de Salud,   entre el período 1993- 2000, realizó 346, 219 ligaduras y 24,535 vasectomías. P. 30.
[9] En estos festivales de salud se implementaban carpas en donde se realizaban las esterilizaciones quirúrgicas luego de convencer a las mujeres.
[10] La eugenesia fue una ideología científica de la medicina para el mejoramiento de la raza, que imperó en Europa y en Latinoamérica a fines del siglo XIX y principios del siglo XX. La primera Conferencia  Panamericana sobre Eugenesia tuvo lugar en La Habana, Cuba en el año 1927. La segunda en Buenos Aires (1934) y la tercera en Bogotá (1938).  En el texto “En busca de la raza perfecta. Eugenesia e higiene en Cuba” (1898-1958) de Armando García Gonzáles se destaca que existen dos concepciones de eugenesia, una latina que se caracteriza por los principios de corte higiénico-sanitario y la anglosajona, que pone énfasis en la herencia. Rosa Medina Doménich. En: Eugenesia y formas de hacer historia. Cuestiones para el debate.  DYNAMIS. Acta Hisp. Med. Sci. Hist. Illus. 2004, 24. Pp. 291-305.
En: http://www.raco.cat/index.php/Dynamis/article/viewFile/113917/142103
[11] Esta comisión estaba integrada también por Juan Succa Rahme; Maita García Trovato y Esperanza Reyes Solari.  Pp.21-23
[12] Artículo 6 de la Ley General de Salud. En: Informe final  de la Comisión Especial Sobre las Actividades Quirúrgicas Voluntarias. 2001.  P.22.
[13] Testimonio Nº 7 de Mery Velásquez Delgado, de 26 años. En: http://www.mamfundacional.org/ef/Testimonios-Mujeres-de-Anta-AQV.pdf
[14] Testimonio Nº 1 de Dolores Quispe Vasquez de 32 años.  Fue operada en la posta de médica de Mollepata el 26 de abril de 1997. Recolectado por la congresista Hilaria Supa. En: http://www.mamfundacional.org/ef/Testimonios-Mujeres-de-Anta-AQV.pdf
[15] Testimonio de Aurelia Cusi Libra, mujer de 35 años, operada en el Centro de Salud de Anta en marzo de 1988.  Es el  testimonio Nº 6, recolectado por la congresista Hilaria Supa.
[16] Recogido por la congresista Hilaria Supa.
[17] Testimonio Nº 12 de Hilaria Huamán Huillca, mujer de 45 años..
En: http://www.mamfundacional.org/ef/Testimonios-Mujeres-de-Anta-AQV.pdf
[18] Relato de los vecinos de la señora Magna. Ibidem. P. 68.
[19] Testimonio del hijo de la señora Magna. Ibidem.
[20] Testimonio publicado por la investigación de CLADEM el cual fue recogido en noviembre de 1997 mediante entrevistas colectivas a organizaciones de mujeres urbanas y rurales. En: “Silencio y complicidad. Violencia contra la mujer en los servicios públicos de salud en el Perú”. P.66.
[21] Testimonio de una comunera, recogido el 25 de noviembre en una entrevista colectiva. Ibidem. Pp.  66-67
[22] Testimonio recogido por Hilaria Supa.
[23] Testimonio  Nº 11 de Florencia Huaylas Vásquez de 44 años. En: http://www.mamfundacional.org/ef/Testimonios-Mujeres-de-Anta-AQV.pdf
[24] Testimonio traducido al español por el equipo de investigación de CLADEM  y publicado en  el informe “Nada Personal”. Pp. 94-95.
[25] Testimonios publicados en el informe final de CLADEM, “Nada Personal.
[26] Testimonio de mujer agricultora de  29 años con cuatro hijos. Fue conducida  a la fuerza por la enfermera  al Centro de Salud de  Izcucha el 27 de mayo para ligarse las trompas.   Publicado por CLADEM. En: Nada personal P. 91-93.
[27] La idea de la  mujer como reproducción biológica de la nación es desarrollada por Nira Yuval Davis en su texto de Género y Nación; en el capítulo 2, “Las mujeres y la reproducción biológica de la nación”. Flora Tristán. Pp. 47- 63.
[28] En:  http://www.rebelion.org/noticias/2006/7/34861.pdf
[29] Difundido en Europa entre 1870 y 1940 junto con las teorías darvinistas,  con las que se interpretó la superioridad e inferioridad de las razas y con las que se justificó el progreso y la barbarie de los pueblos.
[30] Clemente Palma se basó en las ideas del  racismo científico, del francés Le Bon, que consistió en asociar las especies animales con las razas humanas.  En su  tesis de bachiller “El Porvenir de las razas” acerca de la población indígena señaló:   “…raza inferior, sorprendida en los albores de su vida intelectual por la conquista…”
[31] Para Alejandro Deustua, el indígena era naturalmente inferior e imposible de salvarlo moralmente ni con la educación.  Citado por Nelson Manrique. En: La Piel y la Pluma. Escritos sobre literatura, etnicidad y racismo.  Sur Casa de Estudios del Socialismo: 69.
[32] Para Manuel Atanasio Fuentes el indígena era “ignorante, tramposo y sucio”.
[33] La teoría de la herencia de Mendel propagado por el racismo científico
[34] En su texto “Limpias y Modernas. Género, higiene y cultura en la Lima del novecientos”; publicado por el Centro de la Mujer Peruana,1999.    Las tesis eran  de la Facultade San Fernando de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
[35] María Emma Mannarelli. Ibidem.  Pp. 254.
[36] Manarelli sostiene que las condiciones de salubridad en los hospitales eran precarias causando infecciones, mortalidad materna en el pre-pos parto, puerperio y mortalidad infantil.
[37] Nira Yuval Davis. Opcit.P.42.
[38] En: “The Berarers of the collective women and religious.  Legislation  in Israel,  Feminist  Review. Nº 4: 15-27.” 1980. Citado por Nira Yuval  Davis en Género y Nación. Pp.47.
[39] La proliferación de los sujetos dependía de la educación a las  mujeres en nutrición, higiene y puericultura por parte de la salud pública debido a que las madres y gestantes eran  bastantes negligentes y descuidadas.
[40] Nira Yuval Davis.  Op. cit.  Pp. 42, 51. 2004
[41] Ibidem. P. 42.
[42] Las razas consideradas proclives a perpetuar características inmorales  -como la lujuria, el salvajismo, el primitivismo- eran las africanas y las asiáticas. Sobre el pensamiento racista de la época aristocrática,  revísese el texto de Nelson Manrique “La Piel y la Pluma. Escritos sobre literatura, etnicidad y racismo.  Sur Casa de Estudios del Socialismo”.  También el texto de Gonzalo Portocarrero “El fundamento invisible: función y lugar de las ideas racistas en la República Aristocrática”. En: Mundos Interiores. Lima 1850-1950 (2004)
[43] Nira Yuval Davis. Ocpit.
[44] Denominado así en nombre del británico Thomas Malthus quien predijo que antes de 1899, el planeta no soportaría a la población humana que aumenta aceleradamente en proporciones mayores que los recursos alimenticios.
[45] En: “Nada Personal”. Pp15-16.
[46] Informe especial sobre las AQV. P. 130.
[47] Op.cit. 43.
[48] Ibidem. P. 42.
[49] Testimonio de una enfermera del MINSA. Ibidem. P.54.
[50] Nota: El informe final señala textualmente que la Comisión  da a conocer  públicamente este proyecto de Estado sobre el cual no se pronuncia, sin embargo, considera que tiene un valor ilustrativo para futuras investigaciones sobre su validez.  También refiere que el  párrafo mostrado había sido ya publicado  por la Revista Oiga el 12 de julio de 1993 como “Primicia Especial. “ Historia de una Traición, Muchos ministerios quedarán revelados al conocerse el Plan Militar que se consolidó el 5-4-92”.  Pp.73-74.  En: http://www.mamfundacional.org/ef/Informe-Final.pdf
[51] Ibidem. P.74.
[52] María Emma Mannarelli. Op.cit. Pp.  249-250.
[53] En el Congreso de Eugenesia en Londres (1917). Citado por Fabiola Rodhen en su artículo “Medicina, estado y reproducción en el Brasil de inicios del siglo XX2.   2007..
En: http://www.flacso.org.ec/docs/i28rhoden.pdf
[54] Aprobado por la Resolución Ministerial   Nº 071-96-SA/DM, en 1996. En: Informe Final de la Comisión especial sobre Actividades de Anticoncepción Quirúrgica Voluntaria AQV. Lima- Perú. Julio del 2002.  Pp.21-23
[55] En: “The Population Bomb”. Universidad de Stanford. 1968. P. 57.
Es importante señalar que en el supuesto Plan de Contingencia y Emergencia AQV que el informe final de la comisión cita, no se especifica exterminar a un grupo étnico en particular, no obstante, es sabido que los pobres en el Perú  son  justamente indígenas rurales, población a la que se sometió a las esterilizaciones forzadas.  También, cabe dejar en claro, que el Informe Final  de la Comisión Especial, no da luces más sobre el supuesto Plan de Contingencia  y Emergencia AQV. De proseguir con las investigaciones y demostrarse su existencia del mismo, estaríamos hablando de un Proyecto Nacionalista  sujeto a interpretarse como “discurso maltusiano”  y “discurso eugenésico” para evitar el crecimiento de generaciones pobres.
[56] Consigna de la campaña que se realizó en Jaberos, Alto Amazonas, departamento de Loreto.e América. “Nada Personal. Op.cit. Pp.  71.
[57] Testimonio de S/N. 31 años de edad. Ligada en 1997. “Nada Personal”. Ibidem.
[58] Informe  Final de la Comisión Especial Sobre Actividades de Anticoncepción Quirúrgica. P. 82. En: http://www.mamfundacional.org/ef/Informe-Final.pdf
[59] Ibidem.
[60] Norma Fuller. “Foucault: Las Ciencias Sociales como productoras de identidades” En: Después de Michael Foucault. El poder, el saber, el cuerpo.  Casa de Estudios del Socialismo Sur. 2006. P.91-96.
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